viernes, enero 18, 2008

De la pirámide a la red...



Si hay algo que me emociona más que ver el amor entre dos viejitos, verlos caminando lentamente, pero de la mano, a sus ochenta y tantos o noventa años, es ver que las personas se unen para construir algo qua va más allá de su beneficio propio o para ayudar sin ningún interés personal.

Hoy quiero recomendarte este documental, La Toma, que te muestra que es posible hacer que las cosas sucedan si, en vez de permanecer como individuos, nos unimos. Es un documental hecho por canadienses sobre lo que está ocurriendo en Argentina.

De las fábricas abandonadas, del cemento agrietado y de las máquinas oxidadas que quedaron después de que Menem vendió hasta lo que no teníamos, un grupo de ex trabajadores que quedaron sin empleo, están volviendo a las fábricas a trabajar. Sin jefe, tomando las decisiones entre todos, cobrando todos lo mismo, como equipo, sin que nadie tome ventaja sobre el otro, la aplicación viva de la política ganar-ganar.

El lema es “ocupar, resistir y producir”. Toman las fábricas abandonadas y prácticamente destruidas en las que alguna vez trabajaron (algunas con deudas considerables); hacen turnos de vigilancia y combaten con gomeras a la policía que quiere quitarlos; y ponen a funcionar las máquinas para producir, haciendo donaciones a la comunidad, ayudándose entre las distintas fábricas tomadas y viendo la mejor forma en que todos ganen.

Son 15.000 personas las que trabajan en estas fábricas autogestionadas y esta cantidad sigue creciendo cada año. Tal vez estamos presenciando una nueva forma de trabajo que, por los resultados que podemos apreciar, funciona. Así es como surgen los nuevos movimientos, dejando de conofrmarnos con lo que hay y haciendo algo para cambiarlo.

Podés ver este documental completo aquí.

domingo, enero 13, 2008

¿Por qué dejamos que nos piquen los ojos?


Según lo que he leído por ahí, la riqueza total del mundo serviría para que todos pudieran vivir muy bien, sin carencias, sin hambre.

Por otro lado, si nos ponemos a pensar, hasta al más rico le sirve que la gente tenga dinero.

Las empresas siempre están buscando a su público objetivo, aquellas personas a las que está dirigido su producto. Mientras más amplio sea el rango de este público, más compradores tendrán. Uno de los principales limitantes es el poder adquisitivo de las personas.

Ahora, si la empresa vende automóviles de precio intermedio, es algo que le interesará a un grupo con poder adquisitivo que supera cierto límite mínimo. Imaginemos que este rango de personas se amplía, al aumentar el nivel de ingresos de aquellas personas que no estaban incluidas… esto representa mayor ingreso para la empresa.

En caso contrario, si una institución quita la mitad de sus ingresos a cada persona, y luego vuelve a sacar la mitad, y así sucesivamente, inevitablemente la persona se volverá cada vez más pobre (enriqueciéndose alguien más). Esto representa una pérdida para la empresa de automóviles, ya que habrá menos compradores para su producto.

Según la Ley de Pareto, el 20% de la población tiene el 80% de las riquezas. Si este 80% de riquezas estuviera distribuido, representaría más compradores para las empresas.

Podemos concluir que hasta al más rico le conviene que haya dinero en circulación para poder mantener su riqueza e incrementarla. Mientras más dinero haya circulando, la gente podrá invertir más en su negocio.

Entonces… ¿por qué le conviene a cierto grupo de gente con poder que la riqueza esté en manos de unos pocos y que la gran mayoría se esté preocupando por tener lo suficiente para el pan?

Para responderte te planteo otra cuestión…

¿Qué pasaría si sólo una persona en el mundo tuviera superinteligencia, o tuviera la capacidad de leer la mente de otras personas, o de mover objetos con la mente, o cualquier cosa extraordinaria que se te pueda ocurrir?

Esto haría que la persona esté por encima de los demás (independientemente de cómo use esta habilidad), le daría poder.

Ahora, ¿qué pasaría si todas las personas del mundo también tuvieran esta habilidad extraordinaria? La respuesta es simple, ya no sería algo extraordinario, sería algo normal, y ya no concedería poder.

A mi parecer, éste es el pensamiento de las personas que están en el poder, de aquellas personas que quieren mantener a la población con ingresos bajos, entretenidos viendo la tele, y lo suficientemente preocupados por sobrevivir en vez de poner su atención en cómo vivir mejor.

Dicen que en tierra de ciegos el tuerto es rey…
Y lo que están haciendo en este momento es picarnos los ojos a todos, para poder ser los reyes.

La pregunta es, ¿por qué no hacemos algo al respecto? ¿por qué dejamos que nos piquen los ojos?